Maria Barragan
testimonio de

María de Solis

¿Cómo os prometisteis?

Fue un momento extra especial, mi padre estaba luchando contra una enfermedad y Nico le pidió permiso antes de pedirme la mano a mí. Por supuesto me enteré a los 5 minutos de saberlo mi padre. Pero Nico aguantó un poco para pedirme en un viaje de esquí, mi deporte favorito. Mi padre ya faltaba en nuestra boda, pero él nos organizó el sitio, que tenía mucho que ver con mi familia. Fue un proceso (entre pedir permiso, y pedir la mano) maravilloso y emotivo, lleno de ilusión por todas las partes.

¿Por qué María Barragán?

María le hizo el vestido a la mujer de mi primo, fue una recomendación directa de mi tía. Nunca me ha gustado complicarme, me gusta lo elegante, sencillo y de gran calidad. María Barragán reunía todo eso, me enamoré de un vestido que vi en la web, y pude personalizarlo todo lo que quise, al final tuve el vestido de novia PERFECTO. Nunca me ha gustado complicarme, el día de la tercera prueba tenía el vestido perfecto y me lo llevé a casa, con tiempo antes de la boda, fue un gusto.

¿Cómo fue el proceso del vestido?

Lo he contado un poco en la pregunta anterior. No soy muy aficionada a la moda, me daba vértigo el llegar a un estudio que me cambiase las pocas cosas que tenía claras, como ocurre frecuentemente. El poder ver un vestido que encajaba conmigo en la web, probármelo el primer día y trabajar sobre algo que ya veía me dejó super tranquila. Fue la primera diseñadora que fui a ver, y cancelé el resto de reservas, sin siquiera ir, lo tuve clarísimo desde el principio.

¿Cómo te sentiste el día de tu boda?

Me sentía yo. Clásica, discreta, una novia de verdad, con una cola de 3 metros y medio. Recuerdo una frase de una invitada que decía que hacía mucho tiempo que no había visto una novia tan novia, queriendo decir, sencilla y elegante.
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